miércoles, mayo 31, 2006

AUTORIDADES

TODA AUTORIDAD O ES UNA AUTORIDAD EPISTEMOLÓGICA O ES UNA AUTORIDAD DEONTOLÓGICA
Estas palabras cultas no deben ocultarnos el sentido sencillo de la proposición, que se reduce simple y llanamente a esto: una es la autoridad del que sabe y otra la autoridad del que manda. La autoridad epistemológica, en efecto, es la del hombre que sabe más y mejor que el sujeto de esa autoridad. Por ejemplo: es epistemológica la autoridad del profesor sobre sus estudiantes. Es la autoridad del que objetivamente es más instruido. Por el contrario, la autoridad deontológica no es la de quien sabe más acerca de algo, sino la que corresponde al que preside, al jefe, al comandante, al dirigente. Debería quedar claro que una misma persona, con respecto al mismo sujeto y dentro de un mismo ámbito, puede poseer ambas autoridades. O, dicho con mayor exactitud, no se trata del mismo ámbito, sino de dos campos distintos estrechamente relacionados, a saber: el campo de la autoridad deontológica, formado en este caso por ciertas órdenes, y el campo de la autoridad epistemológica, constituido por unas proposiciones de índole práctica. Si, por ejemplo, analizamos la autoridad de un buen jefe de sección en una fábrica de productos químicos, veremos que por lo que se refiere a las personas empleadas en esa sección goza de la doble autoridad. Por una parte, posee la autoridad deontológica, puesto que tiene el derecho de impartirles órdenes; a uno le dirá: "calcula la cantidad de agua necesaria para hacer el producto X"; a otro le indicará: "eleve la temperatura de esa caldera a 320 grados". Pero, como es un buen jefe, disfruta también de una autoridad epistemológica; sabe, por ejemplo, mejor que sus subordinados la conveniencia, más aún, la necesidad de realizar el cálculo y de elevar la temperatura de la caldera hasta los 320 grados, si se quiere conseguir el producto deseado. Pero, y esto es un hecho muy importante, las dos autoridades son independientes entre sí. El que uno tenga la autoridad epistemológica no significa que también posea en ese campo una autoridad deontológica.

J. M. BOCHENSKI, ¿Qué es autoridad?. Ed. Herder, 1979.