sábado, julio 08, 2006

LA ENCICLOPEDIA

Los "filósofos" tienen las mayores dificultades para negar que forman un "partido". Es cierto que la mayoría de ellos ni siquiera se conoce; es cierto que los colaboradores de la Enciclopedia nunca se han reunido en los doce años que dura la edición, cada uno trabaja solo en el tema que se le ha confiado o que ha elegido; pero es muy cierto que, más allá de las diferencias, de las divergencias e incluso de las rivalidades, se sienten unidos por una red de solidaridades cuya configuración les costaría mucho esbozar. No hay secta, no hay partido, no hay programa ni tampoco proyecto planificado de cambio de la sociedad, pero todos se sienten comprometidos en un combate de ideas vinculado a su experiencia de sabio, de escritor, de técnico o de erudito. Forman, sin tener completa conciencia de ello, un nuevo grupo social caracterizado por su libre uso del saber y por su reivindicación de una total libertad de expresión, una comunidad dispersa, idealmente reunida en el mismo culto a la búsqueda de la verdad por los medios de la razón y la experimentación. La comunidad de lo que, un siglo más tarde, se denominará los intelectuales.

PIERRE LEPAPE, Voltaire. Ed. Emecé, 1998.